Menos Denuncias o Más Seguridad

AutorMtro. Jorge A. Alfaro Villamil
Páginas64-65

Page 64

Entre los delitos con disminuciones significativas están: robo de vehículos, a transeúnte, negocio, repartidores y a pasajeros de transporte público, todos ellos con violencia y sin violencia. En el caso del secuestro, identificado como el de mayor impacto social, la diferencia entre las cifras de averiguaciones iniciadas no permite considerar una disminución de importancia significativa. Sin demeritar lo que de positivo tiene medir y reportar en forma sistemática información de carácter tan sensible, no puede dejar de observarse que las cifras se basan en el número de averiguaciones previas iniciadas, lo cual no necesariamente coincide con los delitos cometidos. La razón es muy concreta: en general la gente prefiere no denunciar.

Uno se pregunta ¿la disminución en las denuncias es un reflejo de una menor incidencia delictiva? Decir sí, representa que algunos programas, sobre todo los relacionados con seguridad en la vía pública, funcionan y posiblemente la labor preventiva está dando resultados. Por el contrario, decir no es resultado de la opinión que la mayoría de las personas nos informamos a través de los medios de comunicación y la experiencia propia. Pese a lo alentador que pueden ser datos estadísticos como los revelados por el Consejo Ciudadano de Seguridad Pública, los casos particulares de los cuales todos los días nos enteramos a través de familiares, amigos y vecinos, nos hacen sentir vulnerables ante el robo, la extorsión, el secuestro y la violación.

Es una paradoja que mientras los estudios cuantitativos nos indican una mejora en la seguridad, los casos y sus análisis nos hacen percibir todo lo contrario. La seguri-dad de la población se vuelve un asunto de percepción y creencias. Uno decide a quién o a qué le cree, la opinión se forma según lo que le pasa, lee, oye o ve. La siguiente tabla contiene un resumen de los datos cuantitativos.

En lo personal quisiera ser optimista y sentirme más seguro, más confiado. Sin embargo, en mi entorno inmediato, en los últimos meses he tenidos las suficientes experiencias para dudar de la información estadística ofrecida. Las siguientes viñetas describen algunas:

• En diciembre pasado a mi esposa le robaron su bolsa con dinero, tarjetas e identificaciones en un supermercado, denunció en el ahí mismo y en una agencia del MP. En el primer caso la respuesta del personal de vigilancia fue que no podían hacer nada y el agente del Ministerio se negó a levantar una denuncia por robo y...

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