Guelaguetza intercomunitaria: otra forma de cooperación

AutorJorge Hernández-Díaz - Víctor Leonel Juan Martínez
Páginas199-245
[199]
CAPÍTULO 6
Guelaguetza intercomunitaria:
otra forma de cooperación
MUNICIPIOS, DESARROLLO Y COOPERACIÓN
LA UNIÓN hace la fuerza, es uno de los refranes más repetidos
cuando se presenta un problema que aqueja a varias perso-
nas y que individualmente sería muy difícil enfrentar. Esta sen-
tencia se ha convertido en un lugar común para aludir a la nece-
sidad de realizar un esfuerzo colectivo para resolver problemas
comunes individuales. Sin embargo, no basta la suma de fuerzas
si no hay sentido de coordinación, espíritu de colaboración y una
dirección de esos esfuerzos. Es aquí donde se complica la situa-
ción; las características particulares de cada individuo, la falta de
una cultura para el trabajo en equipo y las diferentes visiones,
pueden obstaculizar hacer el frente común.
Una situación similar se presenta entre los niveles de gobier-
no a la hora de enfrentar la problemática común o definir estra-
tegias para el desarrollo local o regional. La acciones de coordi-
nación intergubernamental no son ni lo frecuentes ni lo eficaces
que se pudiera creer. Si bien la coordinación Federación-estado o
estado-municipio son más practicadas, son pocos los casos cono-
cidos de relaciones intermunicipales.
La realidad municipal de México es muy compleja y diversa.
Se encuentran en nuestro país municipios con alta concentración
demográfica, capacidad financiera y administrativa y desarrollo
urbano, como Tlalnepantla en el estado de México, hasta muni-
cipios rurales, con poca población, en pobreza extrema, escaso
desarrollo administrativo y dispersión territorial, como Metlatá-
noc en Guerrero o Coicoyán de las Flores en Oaxaca.
200 J. HERNÁNDEZ-D. Y V.L. JUAN M.
GUELAGUETZA INTERCOMUNITARIA 201
A los municipios toca enfrentar y resolver las problemáticas
y demandas de sus ciudadanos. En los urbanos, es cada vez más
frecuente que necesiten atender los problemas que trae el creci-
miento desmesurado y, las más de las veces, sin control de asen-
tamientos humanos en su demarcación. En zonas metropolitanas
en muchos casos las fronteras municipales han sido borradas; el
arroyo vehicular de una calle puede ser la división entre un mu-
nicipio y otro y la población muchas veces no distingue esta di-
ferencia. La conurbación trae aparejada una serie de problemas:
cómo brindar con eficiencia servicios públicos; de qué manera
enfrentar el problema de la seguridad pública, la ordenación vial,
la recolección de basura, entre otros, que se complica cuando la
competencia de un ayuntamiento termina en una acera y en la de
enfrente le corresponde a otro. Toca a los gobiernos locales resol-
ver esta situación.
En el otro extremo tenemos a cientos de comunidades dis-
persas, con problemas diametralmente opuestos: caminos, servi-
cios elementales como salud, electricidad, educación, que requie-
ren de grandes inversiones y sus ayuntamientos tienen una
exigua hacienda municipal.
En ambas situaciones una de las posibilidades de enfrentar
esa problemática es estableciendo lazos de coordinación o aso-
ciación con otros municipios, que les permita sumar esfuerzos,
intercambiar experiencias, hacer gestiones conjuntas e incluso
realizar obras o prestar servicios públicos de manera concurrente;
a ese mecanismo de colaboración se le ha denominado intermu-
nicipalidad, que hemos visto en el capítulo 3. Para ver cómo se
han implementado este tipo de esquemas en Oaxaca, veamos
primero las características de sus municipios.
Los municipios oaxaqueños:
problemas y potencialidades
Oaxaca destaca en el concierto nacional por su pluralidad etno-
lingüística y cultural; por su diversidad geográfica. Este estado
sureño cuenta con el mayor número de municipios del país –570
de 2,438–, el 23.37 por ciento del total nacional.
200 J. HERNÁNDEZ-D. Y V.L. JUAN M.
GUELAGUETZA INTERCOMUNITARIA 201
La entidad observa la mayor heterogeneidad en cuanto a con-
formación cultural se refiere. La legislación reconoce la presencia
en la entidad de 15 pueblos indígenas –el 29 por ciento de un total
de 56 que existen en el país–, sin incluir a la población negra de la
costa y la mestiza estatal.
De acuerdo con el conteo de población 2005, la entidad tiene
3’506,821 habitantes, el 3.5 por ciento del total nacional; ocu-
pando el décimo lugar en términos demográficos.342
La entidad tiene un fuerte componente rural. La mayoría de
sus municipios y comunidades pertenecen a esta categoría. Los
570 municipios y 10,511 comunidades nos hablan de la disper-
sión geográfica de la población.343
Los rezagos en el sector rural oaxaqueño se determinan en
parte por esa dispersión demográfica: de esas comunidades el 47
por ciento (5,000) tienen menos de 50 habitantes; el 97.9 por
ciento tiene menos de 2,000; y el 99.3 por ciento menos de 5,000
habitantes.344
Oaxaca es la tercer entidad con mayor índice de marginación
del país, sólo superado por Chiapas y Guerrero. Estos tres estados
conforman el círculo de la pobreza en México; son las entidades
que aún se encuentran con muy alta marginación.
Los indicadores de marginación de Oaxaca se encuentran entre
los más altos del país. El 70 por ciento de la población obtiene me-
nos de dos salarios mínimos mensuales para su subsistencia. En lo
que se refiere a población analfabeta mayor de 15 años, ocupa
el tercer lugar en la escala nacional con el 19.35 por ciento; ocupa la
segunda posición en población mayor de 15 años que no terminó
la primaria (38.49 por ciento). El 35.17 por ciento de la población
habita en viviendas con piso de tierra, el 26.29 por ciento carece de
agua entubada (rubros en que la entidad es el segundo lugar) y el
7.21 no cuenta con energía eléctrica; en este rubro Oaxaca ocupa
el primer lugar nacional. De igual manera el 53.06 por ciento de las
viviendas cuentan con algún nivel de hacinamiento.345
342 Consejo Nacional de Población, Indicadores de marginación municipal 2005, México,
Conapo, 2006.
343 Censo General de Población y Vivienda 2000, INEGI.
344 Marginación Municipal 2000. Coespo-Gobierno del Estado de Oaxaca, 2002.
345 Conapo, Indicadores de marginación…, op. cit.

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR