El espinoso tema de la desigualdad

AutorÁngel M. Junquera Sepúlveda
CargoDirector
Páginas1-1

Page 1

Pocos libros suelen ser tan bien recibidos por el público como El capital en el siglo XXI, del francés Thomas Piketty. Apareció en 2013 y ya se ha traducido a una docena de lenguas. Ha merecido elogios de todas partes del mundo y al menos tres economistas ganadores del Premio Nobel —Robert Solow, Joseph Stiglitz y Paul Krugman— lo han reseñado con entusiasmo.
“¿Por qué cree que su libro ha recibido tanta atención?”, pregunta a Piketty el diario español El País. Lo que responde el francés es que el tema de la desigualdad siempre se había abordado desde el punto de vista ideológico, pero él aporta datos y evidencia histórica sobre la evolución de la distribución de la riqueza en el mundo: “Una de
las paradojas —añade— es que, aunque la
deuda pública es elevada, nunca ha habido
una riqueza privada tan grande en el último
siglo. En países como Francia, Reino Unido,
España o Italia, la riqueza neta del sector
privado equivale a cinco o seis años de
renta nacional de PIB”.

Sus conclusiones, aunque previsibles, no
deben echarse en saco roto. Particularmente,
en un país como México, donde la desigualdad es, querámoslo o no, resultado de las
políticas económicas que se han venido instrumentando en los últimos años y, al mismo
tiempo, el origen de buena parte de nuestros
problemas. De acuerdo con el INEGI, 66.4
millones de mexicanos pertenecen a la clase baja —60 por ciento de la población— frente a un millón 340 personas, que pertenecen a la clase alta. Esto es, 1.7% de mexicanos. La clase media, con todas sus variantes, la forman apenas 44 millones de mexicanos, de los cuales 33 millones son urbanos y 11 millones rurales. Algunos académicos como Luis de la Calle y Luis Rubio han tratado de convencernos de que “todos somos clase media”, pero bastaría darnos una vuelta por el campo
de Oaxaca, Guerrero, Chiapas, Hidalgo o San Luis Potosí, para advertir lo engañoso de esa aseveración.

Independientemente del modo en que se clasi?quen
y se reclasi?quen los ingresos de cada familia, las cifras resultan inquietantes. Cuando advertimos, además, que la FAO no consideró a México entre los 38 países que han cumplido sus objetivos en materia alimentaria —compromisos determinados a nivel internacional—, esta inquietud se...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR