Alternancia, ¿antesala de la democracia?
| Autor | Andrés Reyes Rodríguez |
| Cargo del Autor | Universidad Autónoma de Aguascalientes |
| Páginas | 59-79 |
IV.
Alternancia,
¿antesala
de la democracia?
En Aguascalientes, el inicio de la alternancia política ha sido identicado
frecuentemente con el proceso electoral de 1995. Para muchos otros fue
también el inicio de la vida democrática. Suponiendo que el dato es acer-
tado sería necesario enmarcarlo en una visión amplia de lo que ocurrió
por esos años.109
La lectura de la alternancia tiene una relación directa con otras va-
riables políticas cercanas, como la transición y la democracia. Hay, inclu-
sive, variables concomitantes de otra índole que suelen estar presentes,
como las demográcas, las económicas y, desde luego, el papel de la
cultura en la conformación de una sociedad que se identica con el entorno
nacional, pero que también cuenta con particularidades que la hacen única.
En especial, la alternancia ha tenido coincidencias relevantes con el
proceso de modernización que Aguascalientes experimentó al menos des-
de los años setenta, cuando se dieron los primeros pasos para industrializar
el estado, justo cuando tal dinamismo dio lugar al surgimiento de una zona
poblacional superior al millón de habitantes y un desarrollo de gran con-
centración urbana.
En este contexto, la posibilidad de que diferentes partidos tuvieran
acceso al poder político apareció en un momento en que la diversicación
social se enfrentó con nuevas demandas e innovadores patrones de com-
portamiento, como resultado de la incorporación al mundo globalizado y
también por el contacto con novedades cientícas y tecnológicas inéditas.
Con este proceso de modernización, en 1995 hubo evidencias claras de
una nueva sociedad civil y la posibilidad de tener una sociedad política
distinta a las anteriores.
Una vez denido el entorno anterior en este apartado, se realiza ahora
una evaluación cuantitativa de las estadísticas electorales de la alternancia
y, más adelante, se efectuarán observaciones sobre los cambios institucio-
nales y legales de nuevo cuño, así como la evolución de la administración
pública y las percepciones de los actores directos de este proceso tanto del
gobierno como de los partidos y de la propia sociedad.
El acercamiento a la realidad local mostrará que el cambio político
se acompañó de otros cambios signicativos que obligaron a la reexión
pública sobre el destino de la nueva sociedad que se descubría a sí misma
involucrada en inercias, más que en reexiones y razonamientos. Apenas
en los años recientes se empezó a deliberar el tema, es decir, sobre los
nuevos retos que demanda la economía global, el desarrollo tecnológico,
109 Esteapartadoesunresumendelreportenaldelproyectodeinvestigacióndenomi-
nado“Fuentespara laHistoria políticaenAguascalientes”, cuya claveesPHI 03-2.
Naturalezayconsolidacióndelatransición políticaenAguascalientes.Eltextocom-
pletoaúnesinéditoyseelaboróconunproyectoinstitucionalapoyadoporlaUniver-
sidadAutónomadeAguascalientesconfechadeentregadel6deenerode2006.
60 Primer informe sobre la democracia en Aguascalientes
la acentuación de los vacíos legales, las demandas sistemáticas de demo-
cracia y la participación ciudadana.
Alternancia y proyecto económico
El inicio de la alternancia en Aguascalientes nació asociado con una econo-
mía industrial y de servicios, basada en capitales foráneos y en un mercado
de claros vínculos extranacionales. Este proceso fue acompañado por un
amplio crecimiento poblacional. El cambio dio inició de forma signica-
tiva, cuando el estado pasó de 338 mil habitantes en 1970 a 519 mil en
1980. Con ese ritmo se llegó a 719 mil en los noventa, y en el año 2000 a
una cifra superior al millón de habitantes.
Simultáneamente con el dinamismo poblacional coincidió un pro-
ceso de concentración urbana y un cambio cualitativo de la Población
Económicamente Activa (pea) que precedió a la alternancia política de
los años noventa. En términos generales, la pea de Aguascalientes durante
el siglo xx mostró una signicativa disminución de las actividades agro-
pecuarias y un notable incremento de las industriales, sobre todo de las
dedicadas al comercio y los servicios.110
Desde entonces la base del desarrollo ha estado cimentada en el im-
pulso de la metalmecánica y de la industria electrónica y, durante los no-
venta, en un importante aporte de industrias maquiladoras. Sin duda, la
tradición industrial del estado, el desarrollo urbano, la globalización y el
acercamiento con otras culturas del mundo a través de los diversos medios
de comunicación sirvieron de contexto y plataforma al cambio político de
los años noventa.
Otro dato relevante que precedió a esta década indica que el impulso
industrializador trajo como consecuencia un importante ujo de inmigra-
ción procedente de la región central del país. Este fenómeno arrancó en
1990 y tuvo un saldo migratorio positivo con más de 138 mil inmigrantes,
un dato que se convirtió, con el paso de los años, en una variable expli-
cativa para entender las preferencias electorales que surgieron a partir de
1995, dado que en ese momento casi 30% del padrón electoral no habían
nacido en Aguascalientes.
Otra variable signicativa de 1995 fue que Aguascalientes tenía un
alto índice de desarrollo que se ha mantenido o inclusive ha mejorado en
algunos de sus rubros, como en el caso de los derechohabientes en salud.
Se trata de una sociedad que tenía más de 208 mil hogares y que en 95%
de los casos contaban con energía eléctrica y drenaje. Un conglomerado
social con 8 años de escolaridad promedio entre las personas de 15 años
o más, y un nivel de alfabetismo superior al 95 por ciento.
El inicio de los años noventa también reveló la existencia de una
sociedad plural que abarcaba la idea de varios Aguascalientes y ya no
sólo de esa unidad histórica que se contempló durante años con base en
un sólo modo de ser.111 La nueva sociedad de los noventa tenía ahora
cientos de colonias todavía ordenadas por un sistema político de partido
110 En1940,50% deestetipo depoblaciónse dedicabaalsector agropecuario,13%
lohacíaenel industrialy29%en comercioyservicios.En 1950,estemismorubro
otorgaba36%a lasactividadesdel sectorprimario,21% alindustrialy 34%aco-
mercioyservicios. En1990,las actividadesagropecuariasse redujerona15%del
peayen 2000a 7.4%.Laactividad delsegundo sectorpasóde 34%a 35%enel
mismoperiodoyeltercersectordelaeconomíatransitóde48a49porciento.
111 Elmododeseraguascalentense esuntemaaparte, perosindudaensu denición
másactual debe hablarsede variosmodos que coexisteny que nadatienen que
verconlareduccionistavisióndeloscuatrobarrios.Estadiscusiónsepuedeveren
ReyesRodríguez, Identidades,2008. Tambiénse puedeconsultar BénardCalva y
SánchezGarcía,Vivir,2009.
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