Robo de identidad
| Autor | Mariano Carlos Rosales Ortiz |
| Páginas | 75-111 |
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Cierto día, Sofía, quién trabaja en una empresa importadora de aparatos electrónicos y es ama de casa, recibió una sorpresa terrible. Llegaron a su domicilio dos estados de cuenta de tarjetas de crédito que nunca solicitó, que nunca utilizó y por los que ahora le notifican que debe $27,000.00 (veintisiete mil pesos 00/100 M.N.).
Por supuesto, ella se dirigió en cuanto le fue posible a la institución bancaria que las emitió. Las tarjetas existen. Aparentemente, el banco las emitió al autorizar una solicitud de crédito de una persona que utilizó los datos personales de Sofía. Probablemente utilizó una identificación falsa.
El problema para Sofía, aparte de la enorme presión que significa deber dinero, es que ahora debe demostrar que dichas tarjetas no fueron solicitadas y usadas por ella.
Llamó a la CONDUSEF y ahí la orientaron respecto a lo que tenía que hacer. Dicha institución estima que la clonación de productos bancarios en México genera pérdidas anuales al sistema bancario por un monto de 30 millones de dólares.
Ahora, analicemos qué implica el robo de identidad y cómo podemos protegernos.
El robo de identidad se produce cuando una persona adquiere, transfiere, posee o utiliza información personal de una persona física o jurídica de forma no autorizada, con la intención de efectuar o vincularlo con algún fraude u otro delito.
La identidad la constituyen datos personales como el nombre, teléfono, domicilio, fotografías, huellas dactilares, números de licencia y de seguridad social; números de tarjeta de crédito y de cuentas bancarias; nombres de usuario y contraseñas; incluyendo información financiera o médica, así como cualquier otro dato que permita identificar a una persona. Se debe tener especial cuidado
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en el manejo de documentos, como la credencial de elector, número de seguro social, acta de nacimiento, licencia de manejo y cédula profesional; ya que estos pueden ser falsificados. El robo de identidad es un problema que en los últimos años se ha incrementado con el uso de Internet y el comercio electrónico.
¿Cómo adquieren los ladrones acceso no autorizado a los datos personales de otras personas?
El acceso no autorizado a los datos personales puede llevarse a cabo por diversos medios.
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Por desgracia, en la Web hay personas que intentan recopilar suficientes datos personales como para crear una representación virtual de nuestra persona, con el fin de venderla a otros o utilizarla en su propio beneficio para operaciones tales como abrir líneas de crédito a nuestro nombre. Éste es el motivo por el que el robo de identidad se ha convertido en un tema candente en la actualidad. Por fortuna, puede tomar numerosas precauciones tanto en el mundo real como en Internet para limitar su exposición y proteger su identidad.
La mayoría de las precauciones se basan en el sentido común. Lo realmente difícil son los detalles y la puesta en práctica. Si quiere reducir su exposición a los robos de identidad, convierta estos consejos en parte de su rutina.
No lleve documentos ni tarjetas que no necesite, como por ejemplo la tarjeta del seguro social, el pasaporte y las tarjetas de crédito adicionales. Cuando no necesite usar estos documentos, guárdelos bajo llave en un sitio seguro junto con otros documentos de identidad, como su certificado de nacimiento y testamento.
Cuando se deshaga de documentos con información personal o financiera, destrúyalos antes de tirarlos a la basura o al contenedor de reciclaje. De este modo, los ladrones de identidad que se dedican a husmear en la basura tendrán grandes dificultades para poder recomponer sus solicitudes de crédito, cheques de transferencia e informes financieros. Lo mismo se debe hacer con los permisos de conducir y las tarjetas de crédito que hayan caducado. No olvide darles un buen tijeretazo una vez que haya recibido las tarjetas y los permisos nuevos.
Preste especial atención al correo. Interrumpa su entrega cuando se encuentre de vacaciones y haga los trámites necesarios para ir a recoger la correspondencia confidencial (como por ejemplo cheques nuevos) a la oficina de correos. Incluso puede considerar
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la posibilidad de enviar sus facturas desde la oficina de correo, en lugar de colocarlas en el buzón al alcance de un posible ladrón.
Memorice sus números PIN y si los ha escrito en algún papel, destrúyalo. En ningún caso lleve los números PIN en la cartera o el monedero. Revise atentamente el estado de sus cuentas bancarias, los informes de inversiones y los resúmenes de las tarjetas de crédito todos los meses. Compruebe que no se haya producido ninguna actividad inusual o no autorizada.
Para asegurarse de que nadie esté utilizando su identidad para solicitar créditos, verifique su actividad crediticia mediante alguna de las principales empresas de crédito por lo menos una vez al año.
Incluso si tiene su documentación impresa bajo control, Internet presenta un escenario completamente distinto en el que pueden actuar los ladrones de identidad. Además, debido a que el panorama en línea cambia sin cesar, es necesario ser especialmente cauto a la hora de usar el equipo. Éstas son algunas de las mejores formas de protegerse en Internet. Aprenda a detectar las estafas de phishing. Los phishers, autores de los ataques de phishing, utilizan sitios web y correos electrónicos falsos aparentando ser organizaciones legítimas para engañar a las personas y convencerlas de que revelen sus contraseñas, números de tarjeta de crédito y otros datos confidenciales.
Utilice nombres de usuario y contraseñas exclusivos, formados por una combinación de letras, números y caracteres especiales.
Utilice contraseñas especialmente seguras para sus cuentas de invitado.
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♦ Estas páginas web y estos correos electrónicos falsificados son prácticamente idénticos a sus equivalentes reales, por lo que es necesario tener mucho cuidado con las solicitudes de información importante en línea. No olvide que las organizaciones legítimas NUNCA le pedirán que verifique sus datos personales por Internet.
♦ No envíe nunca su número de seguridad social por Internet. Si alguien lo solicita, verifique la autenticidad del solicitante y proporcióneselo a éste directamente.
♦ Tenga cuidado con el correo electrónico. En muchas estafas de phishing se utilizan los correos electrónicos no deseados como parte del engaño, por lo que es conveniente que instale un buen programa antispam para reducir su exposición a mensajes engañosos. El correo electrónico y la mensajería instantánea no siempre son un medio seguro, y por lo tanto no debe utilizarlos nunca para intercambiar información confidencial.
♦ Proteja con contraseñas todos sus equipos de escritorio, equipos portátiles y asistentes personales digitales (llamadas popularmente “agendas electrónicas”).
♦ Intente reducir al máximo la cantidad de datos personales y financieros que guarda en el equipo. De ese modo, si alguien roba o hackea su equipo portátil o de escritorio, las posibilidades de sufrir un robo de identidad serán menores.
♦ Utilice un firewall personal. Un buen programa de firewall oculta su equipo de los hackers, le permite controlar todo el tráfico de Internet de su equipo y bloquea automáticamente a los intrusos que pueden intentar obtener sus datos confidenciales.
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♦ Compre un software antivirus y actualícelo con regularidad. Una buena herramienta de protección contra virus lo mantendrá seguro contra los virus, los caballos de Troya y otros códigos maliciosos.
♦ Nunca abra un archivo adjunto de correo electrónico o de mensajería instantánea, excepto que conozca quién lo envió y cuál es su contenido. Asegúrese de que el software antivirus analice los archivos adjuntos de correo electrónico y de mensajería instantánea.
♦ Instale un programa antispyware. A pesar de que muchos programas de software espía se limitan a supervisar sus hábitos de navegación por Internet, algunos de ellos se utilizan con propósitos maliciosos, incluidos el registro de pulsaciones de teclado y los robos de identidad.
♦ Si vende o regala su equipo, elimine todos los datos del disco duro antes de entregárselo a su nuevo propietario.
♦ Su identidad es una posesión irremplazable, y si alguien la roba, es posible que tenga que pagar las consecuencias durante años. Así que sea sensato con...
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