Normas de Información Financiera para la agenda 2030
| Autor | C.P. Ariela Díaz Pérez |
| Cargo | Contadora Pública egresada de la Universidad Autónoma de Yucatán |
| Páginas | 62-64 |
C.p. ariela Díaz pérez
Contadora Pública egresada
de la Universidad Autónoma de Yucatán
contabilidadfiscalyfinanciera@gmail.com
La cuenta regresiva que marca el punto sin retorno
respecto al medio ambiente y el impacto que este
sufre derivado de las actividades humanas, ha co-
menzado. Las grandes compañías están mostrando
su liderazgo al adoptar medidas que les permiten
demostrar que son responsables y están comprometidas
con la protección al medio ambiente y el Desarrollo Soste-
nible. Un paso denitivo y contundente para la consecu-
ción de las metas de la agenda 2030 sería alinear las Nor-
mas de Información Financiera (NIF) con los Objetivos de
Desarrollo Sostenible (ODS), ya que son disposiciones de
observancia obligatoria para las empresas.
El presente artículo pretende aportar una visión a
grandes rasgos de qué elementos deben tomarse en
cuenta para el cumplimiento de los ODS en una com-
pañía, por medio de las NIF.
El 25 de septiembre de 2015 más de 150 líderes mun-
diales asistieron a la Cumbre de las Naciones Uni-
das sobre el Desarrollo Sostenible, llevada a cabo
en Nueva York, con el fin de aprobar la Agenda
para el Desarrollo Sostenible. El documento final,
titulado Transformar Nuestro Mundo: la Agenda 2030
para el Desarrollo Sostenible, fue adoptado por los 193
Estados miembros de las Naciones Unidas. Dicho
irreversible. Existen diversas Organizaciones No Gubernamentales (ONG)
en México que, con apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo (PNUD), impulsan acciones que aportan al cumplimiento de los
ODS, programas de concientización y de acción social; sin embargo, ni los go-
biernos ni la sociedad civil son capaces de realizar la tarea titánica que se re-
quiere en tan corto plazo sin la colaboración de las empresas.
La contabilidad, en su naturaleza técnica, ¿es capaz de proporcionar ele-
mentos que permitan alcanzar con éxito los ODS que la ONU se plantea?
Creo que sí, pues la información que proporciona respecto a las actividades
de las empresas y que, conscientes de ello o no, dañan al medio ambiente o
precarizan la vida de otros seres vivos, son susceptibles de ser contabiliza-
das; si las contabilizamos, las conoceremos; si las conocemos seremos ca-
paces de evitarlas en el futuro; sin embargo, para eso es necesario delimitar
la manera de contabilizarlas. No se trata solo de prevenir los daños irrepa-
rables que podamos inigir a nuestro nicho ecológico (que hasta ahora es
de lo único que el derecho positivo ha sido someramente capaz), sino de
denir el rumbo por medio de los caminos que emprendemos (empresas)
y las formas en las que nos relacionamos (compramos, vendemos, damos
servicios, producimos, etc.) en el mercado.
La importancia de las NIF radica en que estructuran la teoría contable,
estableciendo los límites y condiciones de operación del sistema de in-
formación contable. Su evolución, muy bien podría encaminarse a ser un
conjunto de prácticas con conocimiento cientíco, descriptivo y con ga-
rantía metodológica de su propia validez que prevenga y corrija aquellas
actividades que la empresa realiza de manera directa o colateral y que no
estén apegadas con la consecución de los ODS.
A escala mundial, la demanda de mayor transparencia en cuestiones am-
bientales, sociales y de gestión pública han aumentado. Esto ha generado
un debate sobre las mejores prácticas en lo que respecta al proceso de me-
dición e información sobre el desarrollo sostenible. Las NIF pueden ser
un camino para esto. Las normas y certicaciones, como la Contabilidad
Ambiental (ISO14001) y la Certicación de Gestión de Seguridad y Salud
Ocupacional (OHSAS 18001), son excelentes marcos de referencia como
punto de partida para la auscultación de una nueva contabilidad acorde a
estos tiempos de crisis ambiental y humanitaria.
El camino que propongo para realizar este cambio es por medio de las ca-
denas de valor. Cada una de las actividades dentro de la empresa hasta
llegar al producto nal, incurre en costos por agotamiento (de hidrocar-
buros, de recursos forestales, de agua subterránea, etc.) costos por degra-
dación (degradación del suelo, residuos sólidos, contaminación del agua,
contaminación atmosférica) o costos sociales (brechas salariales entre los
diferentes niveles de trabajadores, salud y bienestar de los trabajadores y
la comunidad, educación continua, inclusión y equidad). Los indicadores
deberían desglosarse para cada empresa en particular, de conformidad con
las NIF para ir trazando el camino rumbo a los ODS.
Microsoft anunció a principios de este año la ambiciosa meta de ser en
2030 “carbono negativo”, es decir, eliminará más carbono del que emite,
y para 2050 removerá del medio ambiente toda la huella de carbono que
la compañía ha emitido de manera directa o por consumo eléctrico desde
que fue fundada en 1975. El plan para hacer esto consiste en recortar la
mitad de las emisiones de carbono en todas sus cadenas de valor y sumi-
nistro, así como invertir en compensaciones que pueden incluir la foresta-
ción y reforestación, el secuestro de carbono en el suelo, la bioenergía con
Normas de
Información
Financiera para
la agenda 2030
documento incluye los 17 objetivos del desarrollo
sostenible, cuyas metas son las siguientes:
> Poner n a la pobreza.
> Luchar contra la desigualdad y la injust icia.
> Hacer frente al cambio climático sin que nadie
quede rezagado para 2030.
Fuente: <https://www.undp.org/content/undp/es/home/sustainable-
development-goals.html>.
El año 2030 es considerado como fecha límite para que
el efecto de intervención humana en el planeta sea
MISCELÁNEO
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CONTADURÍA PÚBLICA
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