La ilusión de emular a Juárez

AutorAndrés Henestrosa
Páginas206-207
206
ANDRÉS HEN ESTROS A
Podéis con desabr imiento
quitarme el v erme y el veros,
mas no que por conoce ros
no me agrade mi torme nto:
ser tan hermosos y bu enos,
que lo dejáis todo atrás ,
esto en mí siempre fue m ás,
y lo demás todo men os.
Si por matar al am igo
no podéis ser al abado
y os queréis ver di sculpados
con todo el mundo y conm igo,
cuando huya d e sus senos
el alma triste a demás
miradme, y no pido m ás,
mas tampoco pido m enos.
14 de marzo de 1954
La ilusión de emular a Juárez
La historia, el mito y la leyenda de los grandes hombres son como el polvo a
que se reducen las hojas y las flores que, mezclados a la gleba local, prestan la
arcilla con que se modelan los hombres futuros. Su nombre, su fama, su ima-
gen agrandada por el tiempo, entran a formar lo que se diría la costra social de
los pueblos, y comunican a los hombres que la pisan un efluvio, un calor, una
vibración que propagados por la naturaleza física y espiritual de las gentes,
las van haciendo, acercando y modelando a la manera de los tipos ideales de las
figuras en que todas las mejores esencias de una tierra, se han resumido.
Si no fuera así, uno no podría explicarse por qué sin que los hayamos co-
nocido, con sólo oírles la historia y la mitología, un día nace en nosotros, sobre
todo en la infancia, la decisión de repetir y emular la acción y la vida de los
héroes locales y nacionales y viene a cegarnos como un anticipado relámpago,

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR