Democracia como sistema de vida
| Autor | Alma Mónica Moya Romero |
| Páginas | 189-229 |
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Moya, A. M. | Pp. 189-229
Democracia como sistema de vida
Alma Mónica Moya Romero
Ensayo recibido el 29 de enero del 2016 y aceptado para su publicación el 16 de junio del 2016.
Pero en lo que no he variado es en mi profundo amor por la verdad
y mi respeto por la democracia, único medio de convivencia social,
ISIDRO SATANOWSKY
Resumen
El presente trabajo pretende exponer
algunas de las diversas conceptuali-
zaciones de la democracia que se han
dado a conocer a lo largo de los tiem-
pos, y de forma especial, abordar el
concepto contenido en la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexica-
-
tema de vida”; esto a través de un re-
paso de las diferentes percepciones de
algunos autores, así como de las dispo-
siciones normativas en la materia. Lo
el hecho de que al hablar de democra-
de gobierno de un Estado y sus carac-
terísticas, sino a un aspecto que im-
pacta todos los ámbitos de la sociedad.
Palabras clave
Democracia, sistema de vida, forma de
gobierno, voto y participación.
Abstract
This work exposes a plethora of con-
ceptions of democracy that have been
pretends to take and analyze the con-
cept of democracy provided by the Po-
litical Constitution of the United Mexi-
-
rent authors approaches, and regula-
tion in this area, in order to determine
that when we talk about democracy,
it refers not only to a form of govern-
ment and its characteristics, it also re-
-
pects of society.
Keywords
Democracy, system life, forms of go-
vernment, vote, and participation.
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DE JURE | Revista de investigación y análisis
Número 3 | Cuarta época | Año 16 | Noviembre de 2016
Introducción
Q-
te, o aún etimológicamente a la democracia, pero guardan una idea,
-
mocracia de nuestros días nació en Nueva Zelanda en 1893, al conce-
derse el derecho de voto a las mujeres y a la minoría maorí.
Este concepto se encuentra entre los conceptos políticos de los
frecuencia contradictorios, hasta el punto de convertirse en un térmi-
mencionaba el mismísimo Kelsen (2006) desde el año de 1920 se podía
-
bles y en todas las ocasiones imaginables.
Es evidente que este tipo de expresiones usadas a lo largo de los
siglos pueden ser objeto de diversas variantes, tal como se describe en
palabras de García (1988):
orientación y contenido, en el lenguaje jurídico y político y se prac-
tican con las más diversas y a veces completamente opuestas mani-
festaciones, por lo que merecen una detenida reconsideración y re-
-
rídica para presentar con meridiana claridad su verdadero signi-
clase (p. 261).
Han sido múltiples los personajes que han querido dar vida al
concepto de democracia, quitando o añadiendo elementos, característi-
cas que particularicen lo que debemos entender por democracia. Las va-
-
tudio; sin embargo, para efectos de mostrar nuevos elementos partimos
de lo que nos aporta el artículo tercero de la Constitución mexicana res-
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pecto de la democracia, al establecerla además de una estructura jurídi-
ca y régimen político, por qué no, también como un “sistema de vida”.
A pesar de la multitud de información que existe respecto de la
democracia, para la gran mayoría ha pasado desapercibido o le han res-
tado importancia al concepto establecido en la constitución, del cual se
pretende hacer una mención introductoria de cómo es que podemos lla-
mar a la democracia un “sistema de vida”, tener en claro qué debemos
entender por dicho término. Lo anterior parte de que la publicidad y la
política nos ha mostrado un concepto repetitivo y muy politizado de la
-
das cosas y al mismo tiempo parece carecer de sentido.
Por ello es que a través de una serie de consideraciones que se
vierten sobre la democracia como un “sistema de vida”, se pretende dar
a conocer brevemente en qué consiste esta conceptualización, por qué
debemos ponerle atención, cuál es la diferencia con el resto de los ya co-
nocidos conceptos y cuál es el impacto que se generaría en la sociedad,
si tomáramos a la democracia como un sistema de vida y no sólo como
un ejercicio rutinario de elecciones.
De ahí que resulta necesario tener un acercamiento a la demo-
cracia como sistema de vida, para transformarla en actos que impac-
ten nuestro contexto diario y nos lleven a lograr una nueva visión de la
democracia, que verdaderamente se produzca un mejoramiento en las
condiciones de vida, sin necesidad de perseguir los colores de partidos
políticos o la creación de estructuras gubernamentales.
El vivir la democracia como un sistema de vida nos lleva a for-
mar ciudadanos democráticos, que den como resultado personas in-
sus derechos a todas las personas.
Todo ello deriva del vínculo existente entre la democracia y la
educación; el texto constitucional “esconde” en su artículo tercero la ins-
trucción de inculcar la vida democrática en todos los ámbitos y facetas,
principalmente en el núcleo escolar, en el cual se enseñe al ciudadano
los alcances de vivir la democracia.
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