Conclusiones
| Autor | Carlos Orozco-Felgueres Loya |
| Cargo del Autor | Presidente del Grupo Orozco-Felgueres, consultores fiscales y patrimoniales |
| Páginas | 211-211 |
CONCLUSIONES
Sin duda este estudio es una semblanza general de las disposiciones fiscales, administrativas, legales y
financieras que rigen el funcionamiento de las MIPYMEs. Aunque algunas de estas disposiciones son
obligatorias y otras optativas, no deja de ser tedioso su cumplimiento; sin embargo es parte del proceso y no
se puede ignorar, sino buscar la manera de cumplir y aprovechar la economía de opciones. Así como las
autoridades fiscales nos presionan para cumplir con las obligaciones fiscales, así también debemos buscar las
oportunidades tanto de negocio como de financiamiento y de mejoras al negocio.
La economía de opciones en un sentido amplio consiste en buscar dentro de las disposiciones la que mejor
convenga entre dos alternativas, actuando siempre de buena fe.
La utilización de figuras corporativas que han prevalecido durante el tiempo tienen su razón de ser, por lo que
conservan en el fondo perspectivas que permiten el desarrollo de la empresa dentro de la versatilidad
operativa mercantil y dentro de un mercado competitivo. En realidad las instituciones privadas, públicas y
sociales han cooperado dentro de sus funciones y facultades para crear un menú de alternativas
administrativas, financieras y fiscales que permiten ser un trampolín de crecimiento, expansión y
principalmente el sostenimiento de la MIPYMEs.
Por tal razón estoy convencido de que bajo el principio de responsabilidad social que tenemos como
empresarios, es una obligación estar al pendiente del ambiente interno y externo donde interactúa la empresa.
Siempre hay una causa y un efecto, por lo tanto hay una repercusión y lo que dejemos de hacer en bien de
nuestra empresa después para corregirlo puede ser demasiado tarde, pues nosotros mismos estaríamos
provocando el retroceso del negocio.
La filosofía empresarial se crea con disciplina en los hábitos, por lo que la actualización constante tanto del
empresario como del ejecutivo involucrados en la toma de decisiones es de suma importancia.
La economía de opciones debe ser cuantificable e ir acorde con una toma de decisión, porque si tenemos
programas de apoyos económicos para el desarrollo de proyectos productivos, para capacitación y asesoría
técnica o consultoría de alta dirección, además de estímulos fiscales y una variedad de fuentes de
financiamiento, aunado a esto destellan las figuras jurídicas que nos permiten establecer alianzas
corporativas, el acceso a cadenas productivas e innovación en técnicas, herramientas, sistemas y
metodologías de índole administrativo. ¿Qué más faltaría para que las MIPYMEs se desarrollen?
Estoy convencido de que la voluntad y la disposición al cambio está en nosotros mismos; de que la
responsabilidad social que tenemos como emprendedores y empresarios, independientemente del creci miento
de la empresa, es ante la sociedad. Debemos crear fuentes de trabajo y buscar que la distribución de la
riqueza se disperse entre la población y así se cumplan los derechos constitucionales de contar con trabajo,
vivienda y educación dignos.
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba