Autoetnografía: una forma narrativa de generación de conocimientos

AutorMercedes Blanco
CargoProfesora investigadora de tiempo completo en el CIESAS-DF
Páginas49-74
Andamios 49
AUTOETN OGRAFÍ A: UNA FORMA N ARRATIVA DE
GENERA CIÓN DE CONOCI MIENTO S
Mercedes Blanco*
RESUMEN. Este texto tiene un doble propósito, por un lado,
contribuir a la difusión de una vertiente de la investigación cua-
litativa, y una forma de escritura y presentación de resultados,
denominada autoetnografía. Para cubrir este objetivo se da cuen-
ta de dónde deriva este enfoque, su desarrollo en la última década
del siglo XX y la primera del nuevo milenio, y los principales
elementos que lo caracterizan. Se toma como base la literatura es-
pecializada producida en el mundo anglosajón debido a que su
ejercicio en los países de habla hispana es aún muy incipiente.
Por otro lado, también es primordial el propósito de ofrecer un
ejemplo de este subgénero narrativo. La temática abordada en
el relato personal que se incluye al final del texto está acotada
histórica y socialmente ya que se hace referencia a un momento
muy específico, y poco tratado, que se centra en la vivencia de la
llegada del primer aparato televisor, durante los años cincuenta,
a hogares de sectores medios de la ciudad de México.1
PALABRAS CLAVE. Autoetnografía, investigación cualitativa, na-
rrativa personal, televisión, ciudad de México.
INTRODUCCIÓN
Desde hace décadas la investigación cualitativa no sólo ha venido
llevándose a cabo en buena parte del mundo occidental sino que,
* Profesora investigadora de tiempo completo en el CIESAS-DF. Correo electrónico:
blancos50@hotmail.com
1 En el apartado “El proyecto de investigación” se hará referencia al estudio dentro del
cual se inscribe la utilización de la autoetnografía como una herramienta más que per-
mite abordar el universo de mujeres de sectores medios en la ciudad de México en la
segunda mitad del siglo XX.
Volumen 9, número 19, mayo-agosto, 2012, pp. 49-74
Andamios
50
pareciera, su validez y sus aportes ya no requieren de grandes defen-
sas provenientes de la academia. Sin embargo, dado que lo que ahora
puede ser aceptado como la vertiente cualitativa de la investigación
social no conforma un campo único ni homogéneo, todavía existen fa-
cetas de este prisma que siguen siendo descalificadas por la ciencia
normativa. Afortunadamente, hay voces provenientes tanto del mundo
anglosajón (Flaherty, et.al., 2002) como de posiciones más cercanas
a América Latina (de Souza, 2003) que, aunque reconocen que en
buena medida sigue predominando un modelo global occidental
de racionalidad científica —si bien afirman que está en crisis—, se
pronuncian totalmente a favor de “otras formas de conocer marginadas,
suprimi das y desacreditadas por la ciencia moderna” (2003: 27). En
este encuadre es posible considerar a la autoetnografía como uno
de esos enfoques alternativos para la generación de conocimientos
cu yo abordaje lleva a hacer de forma previa algunas referencias a la
etnografía más tradicional de la cual, en primera instancia, deriva.
ANTECEDENTES: ETNOGRAFÍA
Como sucede actualmente con muchos de los conceptos que suelen
utilizarse en las ciencias sociales en general, y en la investigación cua-
litativa en particular, éstos se han vuelto polisémicos, es decir, cuentan
con una pluralidad de significados. El término etnografía no es la
excepción ya que su sentido no sólo se ha ido modificando, sino que
ha ido haciéndose más complejo. No es el objetivo del presente artículo
dar cuenta de la historia de lo que a lo largo de poco más de un siglo se
ha ido entendiendo por el término etnografía, además de que existe una
amplia gama de textos que abordan su desarrollo2 (entre muchos otros,
Agar, 2006 y Stoller, 1999). Lo que sí es posible hacer es una breve
MERCEDES BLANCO
2 Para el caso de la producción mexicana sobre autores y corrientes internacionales
contamos con la obra de la señera figura del antropólogo Angel Palerm que dedicó
algu nos de s us l ibros preci sament e a una hist oria de la e tnolog ía ( 1967) que
abar ca lo que el autor llama “los precursores” (1974), “los evolucionistas” (1976) y la
escuela británica (1977).

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR