Una teoría sobre el comportamiento de los partidos políticos competitivos

AutorKaare Strom
Páginas119-170
Andamios 119
UNA TEO RÍA SO BRE EL COMPO RTAMIENT O DE LO S PARTIDOS
POLÍT ICOS C OMPET ITIVO S*
Kaare Strom
Traducción: Elena Jiménez Lara
Víctor Alarcón Olguín
La tradición de la elección racional ha generado tres modelos sobre
el comportamiento de los partidos políticos competitivos: el partido
que va en busca del voto, el partido que va en busca del cargo públi-
co y el partido que va en busca de la política. A pesar de lo útil que
resulta en el análisis de la competencia electoral entre partidos y la
conducta de coalición, estos modelos sufren de varias limitaciones
teóricas y empíricas, y no están bien especificadas las condiciones bajo
las cuales se aplica cada modelo. Este artículo discute las relaciones
entre las conductas de búsqueda del voto, de los cargos públicos y de
las políticas, así como desarrolla una teoría unificada de los factores
organizacionales e institucionales que restringen la conducta del par-
tido en las democracias parlamentarias. Los partidos que buscan
el voto, los cargos públicos y las políticas emergen como casos es-
peciales de comportamiento competitivo de partido bajo condiciones
organizacionales e institucionales específicas.
A partir de Downs (1957) las teorías de la elección racional han
venido a jugar un papel cada vez más importante en el estudio de los
partidos políticos competitivos. Los esfuerzos por desarrollar tales mo-
delos de partidos políticos han sido de gran beneficio para la ciencia
política. Las teorías basadas en suposiciones simplistas de los objetivos
del partido y el votante han generado resultados influyentes (aunque
a menudo controversiales). Pero, pese a que los modelos de elección
racional de partidos políticos han sido tan poderosos como sugeren-
tes, han fallado en generar alguna teoría coherente de la conducta del
* El presente trabajo apareció en la revista American Journal of Political Science, V. 34,
núm. 2, 1990, p. 565-598.
Volumen 10, número 23, septiembre-diciembre, p. 119-170
Andamios
120
KAARE STROM
partido competitivo, tampoco han producido resultados robustos que se
apliquen bajo diversas condiciones ambientales. Hay poca teoría que nos
ayude a elegir entre los modelos existentes, y a saber donde fallan sus
supuestos, con frecuencia nos quedamos en la oscuridad.
Puede decirse que la característica y virtud definitoria de la teoría
de la elección racional es precisamente su resistencia a la explicación
ad hoc y su búsqueda de resultados en equilibrio independientes de
las peculiaridades estructurales. Sin embargo, los neoinstitucionalis tas,
los que están dentro y fuera de la tradición de elección racional, han
cuestionado dicha concepción de “teoría pura” (March y Olsen, 1984;
Schlesinger, 1984; Shepsle, 1979). Más aún, la renuencia de muchos
teóricos de la elección racional a aplicar sus modelos de competencia
electoral más allá de candidatos individuales en contextos institucionales
simples ha limitado su influencia al estudio empírico de los partidos.
Mi objetivo en este artículo es proporcionar un marco en el cual
se explique el comportamiento de los partidos políticos que compiten
en las democracias parlamentarias avanzadas.1 Al hacerlo, mantengo el
supuesto de que los líderes de partido son agentes racionales, pero que
enfatizan en las restricciones impuestas por los contextos organizaciona-
les e institucionales. Un propósito es mostrar que los modelos existentes
dependen de supuestos organizacionales e institucionales diferentes, ge-
neralmente implícitos. Otro objetivo es identificar las condiciones bajo
las cuales ocurren las diferentes formas de comportamiento del parti-
do y por tanto, volver endógena dicha variable.
Este artículo tiene seis partes. En la primera identifico tres modelos
del comportamiento de partido desarrolladas en la literatura de la
1 La teoría desarrollada aquí no está dirigida a aplicarse ni a partidos en estados de un
solo partido o autoritarios, ni a organizaciones en sociedades democráticas para las
cuales la respuesta electoral o la oficina administrativa son de poca importan cia.
Más aún, los argumentos presentados aquí asumen un mínimo de estabilidad políti-
ca. Estas restricciones están basadas en dos supuestos fundamentales en el análisis:
1) que los beneficios perseguidos por los partidos políticos pueden ser obtenidos más
eficientemente por medio de elecciones y las instituciones relacionadas discutidas aquí
y 2) que los líderes de partido pueden tener expectativas razonables en relación con
futuras recompensas. Nótese además que la teoría se aplica especialmente a los partidos
en regímenes parlamentarios, aunque la mayoría de los argumentos pudieran ser de
alcance general.
Andamios 121
UNA TEORÍ A SOBRE EL COMPORTAMIE NTO DE LOS PARTIDOS POLÍ TICOS COM PETITIVO S
elección racional. En la segunda se critican estos modelos. La parte tres
comienza a construir una teoría de cómo los tres objetivos especificados
en estos modelos están interrelacionados. Después procedo a desarrollar
una concepción organizacional de partidos políticos y a dis cutir cómo
las propiedades organizacionales afectan la conducta del partido. En la
quinta sección, amplío el análisis a las instituciones dentro de las cuales
operan los partidos; y luego relaciono los rasgos de este contexto con
los objetivos del partido. Finalmente, sintetizo la discusión de las res-
tricciones organizacionales e institucionales para poder especificar
más a plenitud las condiciones bajo las cuales se aplican mejor los
diferen tes modelos del comportamiento de partido. El objetivo no
sólo es integrar estos distintos modelos, sino también mejorar nuestra
comprensión de la conducta del partido bajo condiciones menos
delimitadas.
LOS TRES MODELOS DEL COM PORTAMIENT O DE PARTIDO
Los teóricos de la elección racional han desarrollado un conjunto de
teorías de la conducta competitiva de partido. De acuerdo con los
ob jetivos estipulados por los partidos políticos, podemos distinguir
los siguientes: 1) quienes buscan el voto, 2) quienes buscan el car-
go públi co y 3) quienes buscan la política, entre los modelos del
comportamiento de partido. Estos modelos que pueden subdividirse
aún más, han sido desarrollados para una variedad de propósitos
teóricos y han influenciado el estudio de los partidos más allá de la
literatura formal. Permítasenos considerarlos sucesivamente.
1. El partido que busca el voto
Este modelo deriva del trabajo original de Downs (1957) sobre com-
petencia electoral, en el cual los partidos son “equipos de hombres” que
buscan maximizar su apoyo electoral con el propósito de controlar el
gobierno. Por tanto, los partidos downsinianos no sólo son buscado-
res de votos, sino maximizadores del voto. Éste es el único objetivo que
Downs atribuye a los partidos políticos y es la base de su teoría de

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR