La Máquina del Tiempo Musical y el Matrimonio
| Autor | Lic. Jesús A. Aquino Rubio |
| Páginas | 70-71 |
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Cuando hablamos de matrimonio, inmediatamente sabemos que se debe hablar de divorcio, por ser 2 caras de una misma moneda. Pero la disolución del vínculo es un tema de creciente práctica, pues antes uno se casaba para toda la vida, y si las cosas no funcionaban, los lazos sociales presionaban para evitar el divorcio.
En efecto, sin importar si el propósito del matrimonio era viable, en los años 40s, 50s, 60s y 70s, divorciarse no era una opción para la sociedad, y así lo indican las estadísticas. Quien lo hacía, terminaba señalado por la sociedad, excluidos y consideradas personas no gratas para las familias por su “mal ejemplo”, con mayor énfasis hacia las mujeres.
Sin embargo, la sociedad cambia permanentemente, evoluciona y se reinventa, así como las leyes que regulan su convivencia. El paso del tiempo así lo ha demostrado, y ahora más que nunca resuenan las palabras de Heráclito de Efeso al considerar la naturaleza vibrante y dinámica de nuestra sociedad, que fluye y cambia, rompe paradigmas y tabúes, reinventándose irremediablemente.
El divorcio realmente impacta a nuestra sociedad como un tsunami a finales de los años 70s, principios de los 80s, donde un número impresionante de parejas rompió sus lazos, y el mundo de la música lo registró puntualmente. De la mano, surge un movimiento feminista, donde la mujer quiere demostrar que es igual o más fuerte que el hombre, y reclamando sus derechos, lleva al extremo la postura a decidir sobre su cuerpo en todos los sentidos, generando un gran revuelo por estar la discusión en el corazón de una sociedad mayormente católica y conservadora.
Lupita D’Alessio se erige como la promotora de la causa de las mu-jeres, y aborda diversos temas con gran éxito relacionados con la pare-ja, como Mudanzas, Qué Ganas de no Verte Nunca Más, Mentiras, Juro que Nunca Volveré, o la famosísima Lo Siento mi Amor, cuya frase “hace tiempo que no siento nada al hacerlo contigo” cimbró en lo más profundo de nuestra sociedad, pero tuvo el valor y el mérito de abordar a favor de la causa, el reclamo de un mayor respeto y consideración a sus necesidades, eliminando la figura de la mujer abnegada bajo cualquier circunstancia, siendo reflejo del sentimiento de miles que encontraron en esas razones, los motivos para divorciarse.
Los baladistas hombres se sumaron al fenómeno. José José, Camilo Sesto, Emmanuel, Juan Gabriel, por citar algunos, no solamente realizaron grandes éxitos vincu-
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lados al desamor...
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