Guerra de divisas. Lamentable posibilidad
| Autor | Luis Núñez Álvarez |
| Cargo | Investigador Financiero investigador |
| Páginas | 55 |
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Los grandes organismos internacionales como el Banco Mundial (BM), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el propio Tesoro de los Estados Unidos, han expresado su inquietud respecto a cómo se han venido manejando las divisas en los países emergentes.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, ha advertido, sin hacer una referencia específica a China, que la excesiva devaluación de las monedas en algunos países emergentes puede poner en riesgo la recuperación económica mundial. El movimiento de las divisas en los países emergentes es una preocupación bastante considerable, al grado de figurar como tema central en la próxima reunión del G-20 a celebrarse en este mes de octubre. A su vez, también será tema central en las reuniones del BM como en las del FMI.
Es China el país que más se resiste a llevar a cabo el reposiciona-miento de su moneda, pues considera que perjudicaría sus exportaciones; los países desarrollados consideran perjudicial y poco comercial este proceder. Además de China, otros países como Brasil y Corea del Sur han estado tomando medidas para mantener la cotización de sus monedas, lo que ha llevado a algunos expertos a hablar de una posible guerra de divisas.
Entre los problemas señalados por mantener en forma artificial el valor de las monedas, se dice que los países emergentes pueden causar inflación y burbujas en sus economías, aunque también puede dar como resultado el freno al crecimiento en el consumo y la creación de distorsiones a corto plazo en favor de las exportaciones.
Ya comenté líneas arriba que la política de cambio que están aplicando los países emergentes se ha convertido en motivo de tensión, pues a pesar de que utilizan la situación a fin de incrementar sus exportaciones, los países ricos están preocupados porque lo consideran una manipulación y un daño a sus empresas exportadoras, pues al cotizar sus monedas más alto, los importadores preferirán aquellos países cuyos precios sean más baratos y competitivos.
El Ministro de Finanzas de Brasil, Guido Mantenga, ha denominado a esta situación como el eje central de la asamblea que llevarán a cabo tanto el FMI, como el BM en Washington, pues como lo ha expresado el propio Dominique Strauss-Kahn, director gerente del FMI, esto va que vuela hacia una guerra de divisas si los países emergentes se empeñan en resolver sus problemas manipulando los tipos de cambio.
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